¡Hola, hola!
¿Cómo estáis?

Hoy os traigo un post un poco diferente, ya que no seré yo la que os cuente, sino que tengo un súper colaborador.
Don R. nos habla sobre Kingsman, de la que os di mi opinión en ECDL del mes de Marzo, en este post.

Y ya, sin más dilación, ¡os dejo con Don R.!
Hay un par de spoilers. Quien avisa no es traidor 😉

KINGSMAN de Matthew Vaughn

Hola a tod@s.
Dejad que me presente: soy Don R., colaborador esporádico de este sitio. Tan esporádico que de momento no son obra mía más que los textos de cabecera.

Hace un tiempo, A., me propuso ver la película Kingsman y, aunque ni soy demasiado cinéfilo, ni entro en el público objetivo de un film como éste, acepté el reto.

¿Qué decir de esta película que no se haya dicho mil veces en otro sitio? Poca cosa. Sus virtudes son muchas: es entretenida, trepidante a ratos y, sobre todo, divertida… muy divertida.

Brevemente: narra la transformación de un joven perdedor de extrarradio, en el agente secreto definitivo. No hace falta dar más detalles para saber que, al final, el bien triunfa sobre el mal gracias al protagonista.

Los personajes son un cóctel interesante que combina con acierto un héroe que se hace a sí mismo, un tutor elegantísimo y sanguinario a partes iguales y un malo malísimo que roza el ridículo.
Sinceramente, Samuel L. Jackson merece mejores papeles, sin embargo, y como es de esperar, lo borda. Por más que uno no pueda dejar de ver en sus ojos al Jules de Pulp Fiction… 😉
Colin Firth es, sin duda, otro gran protagonista de la película. Uno de esos secundarios que se erige como principal y que el espectador recordará aún más que al joven Taron Egerton o al siempre convincente Michael Caine, que aquí también cumple con creces, como es de esperar de un actor de su categoría

La acción apenas decae a lo largo del film y las sonrisas del espectador se saben continuas. Algunas escenas son míticas como la de (SPOILER) los cerebros de los ricachones explotando al compás de música clásica (/SPOILER) o aquella en que la esbirra del malo (SPOILER), armada de dos piernas-sable, parte por la mitad a un agente Kingsman cual Freezer de Dragon Ball (/SPOILER).

Pero hay mucho, mucho más que no vale la pena leer sino ver, pues, realmente, merece la pena.

Si no la habéis visto aún, hacedlo.
No os arrepentiréis.

¡Hasta pronto!

¿La habéis visto o queréis verla?
¡Contadnos! 😀