Reseña: Un mundo Feliz de Aldous Huxley

¡Hola, hola y feliz nuevo día de reseña!
Nos vamos poniendo al día, ¡poco a poco!
¿Lo bueno? Que aún quedan reseñas para rato… 😉

Para el día de hoy, os traigo el comentario de otro clásico de la ciencia ficción, que leímos como colofón (quitando la lectura veraniega que comentaremos en Septiembre), para el Club de Lectura Quimèric (llevado a cabo por las bibliotecas públicas de la ciudad), donde leemos libros de ciencia ficción y de género fantástico (aunque este año ha caído hasta alguno de terror…) y del que hablamos, por si os lo perdisteis la pasada semana, en el último programa de radio llamado Quimèric (mismo nombre, ya que lo conduce el mismo equipo), de Radio Sabadell, donde fui una de las invitadas para, como bien os comento, hablar sobre este Club y, en general, comentar un poco sobre esta actividad.

Si queréis oír el programa (ojo, en catalán), os lo dejo por aquí:
click para acceder al audio

Y bueno, ya sí, ¡empezamos reseña!

Un Mundo Feliz de Aldous Huxley

Un mundo feliz es un clásico de la literatura del siglo XX, una sombría metáfora sobre el futuro.
La novela describe un mundo en el que finalmente se han cumplido los peores vaticinios: triunfan los dioses del consumo y la comodidad, y el orbe se organiza en diez zonas en apariencia seguras y estables.
Sin embargo, este mundo ha sacrificado valores humanos esenciales, y sus habitantes son procreados in vitro a imagen y semejanza de una cadena de montaje.

Huxley nos presenta, en esta historia publicada en 1932, una sociedad perfecta, con gente perfecta y en donde no tiene cabida la tristeza, el miedo o cualquier otro sentimiento que no sea la felicidad…

OPINIÓN PERSONAL

En este mundo, Henry Ford es el creador y Dios de esta nueva sociedad donde domina la perfección y la felicidad.
Pero, ¿cómo se consigue esto?
Las “personas” son creadas, moldeadas y educadas de una única manera; creados en laboratorios, con el mismo aspecto físico (y (casi) eternamente jóvenes), se dividen en castas: Alfa, Beta, Delta, Gamma y Épsilon siendo, los primeros, la élite, los más codiciados, valiosos y, los últimos, la clase más baja y trabajadora.
Cada clase social sabe lo que tiene que hacer, cómo vivir y trabajar y, como no han conocido nada diferente, no hay quejas ni piensan que exista nada distinto… Salvo uno de ellos, Bernard Marx, quien, por un error en su proceso de creación (su altura es diferente a la de los demás) es diezmado y discriminado por los de su clase.

En su afán por hacer ver a los demás y entender, también, para él mismo, la sociedad en la que viven, se embarca en un viaje hacia lo desconocido, hacia la sociedad que, representa, son salvajes (la que sería nuestra sociedad de ahora mismo, donde vivimos): un mundo donde las personas nacen, crecen, envejecen y mueren. Una sociedad donde la gente trabaja, sí, pero hay tiempo para la tristeza, para vivir y soñar. Lo que aquí vemos normal, una sociedad natural y ordinaria, Huxley, nos la presenta como lo salvaje, sin evolucionar.

En dicho viaje conoce a John, el salvaje, el conector entre los dos mundos, como si habláramos del pasado y el futuro. Un personaje con sueños, que sabe leer y escribir, a quien le gusta Shakespeare, habla de Otelo y el que, queriendo salir del mundo en el que vive, es empujado a ansiar formar parte del mundo feliz. Pero se da cuenta de que no es para él. Nunca podrá formar parte de una sociedad con “personas” sin corazón, sin un ápice de tristeza cuando alguien muere, superficiales y casi seres inanimados…
Un mundo donde la droga, llamada Soma, es la forma de escapar, de evadirse, de tomarse unas vacaciones…

(…) Actualmente el mundo es estable. La gente es feliz; tiene lo que desea, y nunca desea lo que no puede obtener. Está a gusto; está a salvo; nunca está enferma; no teme la muerte; ignora la pasión o la vejez; no hay padres ni madres que estorben; no hay esposas, ni hijos, ni amores excesivamente fuertes. Nuestros hombres están condicionados de modo que apenas pueden obrar de otro modo que como deben obrar. Y si algo marcha mal, siempre queda el soma. El soma que usted arroja por la ventana en nombre de la libertad, Mr. Salvaje. ¡La libertad! —el Interventor soltó una carcajada—.

Además de esto que os cuento por aquí, la historia va más allá: entran nuevos personajes, hay rebeliones y lo “salvaje” se convierte en la parte importante en toda la historia, pero… ¡Que no cunda el pánico! No desvelaré nada más, para que podáis leerlo tranquilamente 😉

En sus 256 páginas, nos encontramos con una narración un poco densa al principio, cosa, diríamos, normal, por el hecho de tener que presentarnos toda la sociedad, lo que ha ocurrido y cómo está el mundo ahora (en el futuro de 1932, vaya… 😜), con crítica social incluida y donde se plantea, con riesgo por la época en la que está escrita la historia, una visión de los avances tecnológicos que podría haber en un futuro y cómo podría llegar a usarse dicha tecnología.

Algo que quiero comentar, como punto a tener en cuenta, es el hecho de que se mezclan historias, tiempos y diálogos de diferentes personajes, en un mismo párrafo. Sin aviso previo, estás metido de lleno en una situación y, de repente, te encuentras con un diálogo que no encaja, de una situación totalmente diferente y nueva. Esto hace que se haga un poco complicado ir siguiendo el hilo de la historia, pero, salvo este pequeño detalle, es una historia muy recomendable e, indudablemente, para reflexionar…

¿Realmente son felices?

¿Conocéis esta historia?
¿La habéis leído o queréis hacerlo?
¡Contadme! 😀

 

3 comentarios en “Reseña: Un mundo Feliz de Aldous Huxley

    1. ¡Hola Andoni! Ante todo, muchas gracias por tus palabras, un placer tenerte por aquí y, sobre todo, es genial haber descubierto tu reseña. No me ha parecido que te dejaras nada en el tintero: muy bien explicada y detallada. ¡Me ha gustado mucho! Y veo que tanto a ti como a mi, nos ha gustado la lectura 😊 ¡Un abrazo y gracias por pasarte!

      Le gusta a 1 persona

Deja un comentario

Este sitio utiliza Akismet para reducir el spam. Conoce cómo se procesan los datos de tus comentarios.